SOY ESTRELLA…
Tengo un sueño y siento que Dios también lo tiene, y nos va ayudar para que se haga realidad.
En
estos 4 años que llevo en Cabo Delgado, sobre todo los tres últimos,
veo necesario construir un centro, una casa, un hogar.... para cuatro
realidades que cada día me encuentro, y siento cada día una gran pobreza
por no poder darles respuesta.
1. Los ancianos abandonados. Los hijos muchas veces se van, por la
necesidad de buscar sus tierras de cultivo u otros trabajos, y los
padres van envejeciendo solos y en algunos casos en una situación que se
te encoge el alma.
2. Los afectados por la lepra que necesitarían un lugar para hacer las
curas a diario, y en la mayoría de los casos un centro de salud está a
muchos kilómetros de distancia. Además, el recorrido es imposible
hacerlo por no poder caminar, así que están condenados a que sus
heridas estén siempre llenas de moscas y con un olor nada agradable ni
para ellos ni para los suyos.
3. Los disminuidos psíquicos. Tenemos muchos enfermos psíquicos tirados
en la calle, y muchas veces son expulsados de sus casas porque piensan
que es problema de los espíritus. No les dan ni un medicamento... ¡Se me
parte el alma!
4. En las aldeas me encuentro de "todo": hay veces que me encuentro
niños o adultos que deberían ser vistos por un especialista, y los
traigo y acompaño al hospital. Son vistos por el médico, les compro el
tratamiento y les pago el transporte de regreso. Pero siento que no
estoy haciendo nada o casi nada. Lo ideal sería tener un hogar para que,
al menos durante un mes, pudiésemos acompañarlos de cerca, y no tenemos
ningún lugar adecuado. Por lo tanto, ¿la consulta que han hecho les
servirá de algo?
Esta
dura realidad de Pemba me invita a soñar, y me gustaría soñar contigo,
con vosotros este sueño de Dios. La meta será construir una casa donde
podamos dar un poco de alivio y cualidad de vida humana a estos hermanos
nuestros, lo cual se hace cada vez más necesario. En toda la provincia
de Cabo Delgado no tenemos ningunas instalaciones para estas
necesidades.
Este
es mi sueño y creo que Dios también lo quiere. Por eso con la ayuda de
todos y todas haremos este sueño realidad y aliviaremos el sufrimiento
de muchos hermanos nuestros que no han tenido la suerte de nacer y vivir
donde nosotros nacimos.
¡¡¡Juntos podemos!!!!