Compartimos esta hermosa historia que nos envía Estrella...lean con atención:
Esta tarde recibí un gran regalo y una visita que me sobrecogió y alegró muchísimo. Ebraimo es uno de los ancianos que estamos atendiendo en su "casa". El fue militar, vivía en el Distrito de Montepuz y al fallecer su esposa, la familia de la difunta lo echó de casa. Vino a Pemba y lo acogieron 2 hermanas, también mayores. Él duerme en la baranda de la casa por respecto a sus hermanas. En las visitas que íbamos haciendo, estaba bastante mal, con desnutrición. Le dimos un poco de comida para reforzar y garantizar alimento en un tiempo, productos de higiene y tratamiento. El día 1 fue uno de los convidados, dió su testimonio y pidió al gobierno que nos acogieran con las 2 manos y nos ayudaran. Que él no caminaba y ahora lo veían allí de pie....
Hoy vino a visitarme con 6 cocos, lo poquísimo que tienen aún da para tener un gesto de gratitud. Como si fuese mi padre me preguntó: ¿Mamá usted está bien aquí?. Los pobres nos sorprenden y enseñan tantas cosas.
Gracias Dios por papá Ebraimo, bendícelo a él y a todos los viejitos. 🙏🤗😘
